Escrito por: Carlos Neva, Systems Engineer VMware
¿Porque la tecnología? ¿Alguna vez seguramente nos hemos hecho esa pregunta, porque una empresa debe gastar millones de dólares en hardware, software y servicios implementando sistemas de información? ¿Qué valor le proporciona esto para justificar la inversión y los esfuerzos desarrollados?
Cada uno de los inventos que hemos visto en el mundo de la tecnología ha tenido un mismo objetivo: hacer las cosas más simples, podemos ver como en algún momento alguien pensó en que era más sencillo tener bombillos que velas, como con el tiempo nos dimos cuenta de que era más fácil hacer funcionar una máquina con energía eléctrica y no con carbón, hemos creado máquinas que ocupaban el espacio de una oficina completa, y que eran capaces de hacer complejas operaciones matemáticas en un tiempo mucho más corto del que nosotros nos gastábamos, luego con el tiempo hemos ido reduciendo el tamaño de esas máquinas (porque es mucho más sencillo todo si son más pequeñas) y aumentando sus capacidades…
¿La evolución de los computadores de escritorio en una imagen que vendrá en un futuro?
En algún momento entonces comenzamos a cambiar la manera de “programarlas” porque el uso de las tarjetas perforadas se estaba tornando demasiado complejo, y creamos lenguajes de programación cada vez más similares al lenguaje humano, para simplificar el proceso del desarrollo y crecimiento del software, entonces decidimos que necesitábamos tener un intermediario para hablar con este “hardware” y creamos los sistemas operativos que con el tiempo pasaron de ser interfaces de comando a entornos gráficos con ventanas y botones….
La evolución de los lenguajes de programación, yo me quede en Java…
Los ejemplos son infinitos, aunque no siempre hayan tenido los resultados ideales (muchos ejemplos se vienen a la mente), y el mensaje es completamente claro: la tecnología está aquí para de una u otra forma hacer nuestra vida más simple.
¿Qué pasa cuándo no cumplimos entonces con ese objetivo principal? ¿Cuándo la tecnología nos complica la vida? Tomemos el caso del famoso Windows Millenium Edition (Windows ME), lanzado el 12 de septiembre del 2000, este sistema operativo estaba tan lleno de bugs, inestable y difícil de usar que los usuarios se vieron en muchos casos obligados a regresar a Windows 98, o pronta-mente a migrar a Windows XP (para mí el mejor sistema operativo de escritorio que ha existido, valga la aclaración); el fracaso fue tal que Microsoft termino sacando al mercado a su sucesor (Windows XP) apenas un año después de liberado ME, cuando la versión anterior (Windows 98), duro en el mercado algo más de dos años; muchos usuarios terminaron por denominar a Windows ME, como el verdadero bug del Y2k.
¿Pensemos por un momento, podríamos tener una empresa hoy en día en la que no existieran los computadores? ¿La respuesta no es lo que se imaginan… que tal la panadería de la esquina? ¿Seguramente si podríamos, claro, teniendo en cuenta que habría muchos procesos complejos, la contabilidad se llevaría a cabo con papel y lápiz, los mensajes serían escritos en hojas pequeñas y enviadas mano a mano… pero y si la complejidad de los procesos crece? ¿Y si la panadería empieza a crecer en su número de clientes y necesita más sedes? ¿Y más empleados? Acá es donde aparece nuestro tema de hoy como salvador, simplificando todo, haciendo que un proceso que sería tremendamente complejo y costoso en esfuerzo y tiempo como manejar la contabilidad de una cadena de panaderías con 20 sedes en la ciudad, sea tan sencillo como instalar un software contable en un computador.
Toda empresa funciona bajo un mismo precepto que es el corazón del mundo capitalista en el que vivimos: incrementar la utilidad; no necesariamente se trata de ganar más, ni tampoco de gastar menos, se trata de que la ecuación (ingreso – gasto) siempre nos del mayor valor posible, es una constante ineludible.
Así funciona nuestro mundo actual.
¿Formulemos entonces otra pregunta: es completamente indispensable la tecnología en las empresas? ¿Desde un punto de vista netamente técnico, hay muchas empresas que posiblemente podrían funcionar con sólo papel y lápiz, pero, porque no lo hacen? Porque la complejidad es muy grande, y el costo de operar (el gasto de nuestra ecuación) es demasiado alto, lo cual hace el ejercicio mucho menos rentable (o inclusive en muchos casos, genera pérdidas!); los sistemas de información, en cuyo corazón está la tecnología, son quienes en mayor medida aportan lo necesario para que la operación del negocio sea lo más económica posible, e inclusive aportando valor para incrementar la ganancia, nuestra protagonista del día de hoy es el eje central bajo el cual se mueve la ecuación!
Ésta es la ecuación de Utilidad para un restaurante, así de sencillo es entender el eje central de nuestra economía.
Entendamos esto en nuestro entorno actual: los famosos pilares de hoy en día, la nube y la movilidad, son tan fuertes porque nos permiten hacer cosas que antes no eran posibles; ni eran por su complejidad para ser alcanzables, y estas funcionalidades o características que nos proporcionan nos permiten manejar nuestra ecuación, reduciendo los costos e incrementando el ingreso; las compañías más exitosas hoy, son aquellas que han entendido claramente como sus procesos tecnológicos impactan su negocio, y cómo sacar el mejor provecho de ellos.
¿En dónde encaja VMware en todo este escenario? Bueno, si lo miramos históricamente, en VMware siempre hemos estado alineados con esta razón de ser, comenzamos a inventar una manera de simplificar y abstraer la ejecución de los sistemas operativos del hardware, permitiéndole a una empresa hacer un uso mucho más eficiente de sus recursos, lo cual implica necesitar menos de ellos, menos gasto; continuamos con la idea de simplificar esta operación en el datacenter entregando herramientas para administrar y manejar estas “máquinas virtuales” de manera más sencilla; construimos también soluciones para ofrecer este mismo tipo de ventajas en los ambientes de trabajo de los empleados de la empresa (sus escritorios); y a día de hoy tenemos una propuesta aún más clara y concreta para nuestros clientes: el datacenter definido por software.
Así se ve el Datacenter de uno de nuestros clientes: sencillo, funcional y escalable.
¿Qué tan complejo es administrar el almacenamiento de la información en nuestra compañía? ¿Qué tan fácil es el manejo de todo lo que tiene que ver con redes y seguridad de la información? ¿Qué tan difícil es administrar todos esos dispositivos móviles que tienen nuestros empleados? ¿Cuántas soluciones diferentes necesito? ¿Cuánto conocimiento? ¿Cuánto esfuerzo y tiempo?
¿Así está creciendo el volumen de información a nivel global, como administramos esto?
Al final del día, lo realmente importante no es el precio de la solución, se trata de que las ventajas que nos entregue nos ayuden de manera clara y directa a mover la ecuación en el sentido que deseamos. En VMware tenemos claro esto, es parte de nuestro ADN entender como nuestros productos y soluciones ayudan a nuestros clientes a conseguir sus objetivos, siempre teniendo en cuenta la idea principal: mejorar su calidad de vida haciéndolo todo más fácil a través de la tecnología.
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