Sabemos que muchos de nuestros clientes son socios estratégicos de Cisco y también de VMware. A lo largo de los años, nos han venido diciendo que desean utilizar las dos tecnologías juntas. Pues bien, es posible.
A nadie se le escapa que las redes funcionan mejor cuando el hardware y el software trabajan al unísono. No es que pensemos que haya que deshacerse del hardware. Creemos que la infraestructura física sigue siendo importante, pero el hardware por sí solo no puede ofrecerle el enfoque de seguridad proactiva que necesitan sus datos ni ofrece la excelencia operativa. De hecho, sacará más partido a sus inversiones en hardware si adopta una estrategia para la red que dé prioridad al software. Esto le permitirá disfrutar de lo mejor de ambos entornos.
Las necesidades actuales no se satisfacen con estrategias del pasado
Con las redes tradicionales centradas en el hardware, los entornos de TI corren el riesgo de quedarse rezagados, ya que merman la productividad, suelen estar obsoletas y aumentan la complejidad de la cloud. A medida que crece el número de terminales y entornos, la tarea de gestionarlos cada vez requiere más tiempo. Las redes físicas no son intuitivas, lo que significa que tienen que adivinar las necesidades de las aplicaciones. Y lo que quizássea más importante, la seguridad de las redes físicas es reactiva en lugar de proactiva, lo que pone en riesgo los datos.
La red que da prioridad al software
Con una red integrada que da prioridad al software, se evita el costoso y laborioso ciclo de actualización del hardware. Una solución VMware NSX proporciona seguridad integral para las aplicaciones y los datos, y ayuda a aumentar la agilidad y la capacidad de respuesta ante unas necesidades empresariales en constante evolución. Además, a medida que aumentan los usuarios, los datos y los dispositivos, el enfoque que da prioridad al software permite abordar el problema sin crear equipos nuevos ni aumentar el presupuesto. Pero esto no es todo, las soluciones NSX hacen posible la excelencia operativa al automatizar los procesos, disminuir el riesgo de errores humanos y reducir el tiempo dedicado a rehacer el trabajo.
Nuestra guía «Software-Defined WAN For Dummies» explica cómo migrar a una red distribuida menos compleja, más flexible y fácil de gestionar, sin necesidad de deshacerse del hardware existente. Descargue la guía aquí.